jueves, 24 de septiembre de 2020

Postales de Venezuela

 





A los caídos, más que unas palabras.

(11 A)

Voces que se callan

para que otras no lo hagan,

aunque sobren las palabras

no es en vano usarlas,

por las vidas soslayadas

tras conciencias ensangrentadas,

pero hace falta más que lagrimas

al defender la patria,

rabia que nada en medio de las balas,

no busca la orilla ni siquiera esquivarlas,

sin un paso atrás

frente a quien se ensaña,

y es que mansalva es mas

que una palabra,

es el arma más malvada.

La sangre derramada ¿cómo olvidarla?,

pero no con el rencor

de quien busca la venganza,

si el pueblo que murió

al luchar contra una espada,

marchaba con una voz

que no buscaba represalia,

era el clamor de no tener que reclamarla.

Los inocentes cuyas vidas arrancadas

no hay quien pueda regresarlas,

nos miran desde arriba

cumpliendo su palabra,

la que debe ser cumplida,

no retroceder si atrás no está la patria. R.R.R. 2002


 "Vuela alto donde el odio no te alcance". Palabras de una madre.

Tanto odio palpable, en un Gobierno sediento de sangre.

Opresor por el terror a rendir cuentas, 

un criminal con el poder que por ahora a otros encarcela.

Cuantos minutos de luto, convertidos en horas de silencio,

por cada muerto, torturado, perseguido, hambriento y preso.

Padres que entierran a sus hijos;

enfermos cuya cura le quitan de sus manos;

despedidas de aeropuerto; el crimen en pensar distinto;

son el día a día en este rojo calendario.


Un tirano vendedor de la idea de que el futuro está marchito,

dueño de las armas, quiere que sus mentiras se crean,

y que hagamos borrón y cuenta nueva con sus delitos.

Disfrazando afuera de Venezuela sin éxito 

lo que tampoco engaña adentro, falsedades al descubierto,

lo que hay en cada censura en los medios,

nuestras calles son su cárcel, y más pronto que tarde,

él tendrá que encerrarse y después habrá que botar la llave,

porqué más que un corrupto, opresor, dictador e ignorante, 

Maduro no es un Presidente, sino un asesino de estudiantes. R.R.R.


Billetes de juguete en el suelo, 

ceros de más, ceros de menos, 

el mismo desconcierto.

Recuerdan los padres de los niños perdidos, 

hijos de la crisis, cuya inocencia 

esta pérdida en un abismo.

Familias sin paciencia 

frente al tiempo de los políticos.

Navidades entre velas, con sudor y hastío.

Sentimientos y pensamientos 

que adoptaron el racionamiento,

se ahogan en su desasosiego,

cuando la vida se resume en un morral,

y tanto que decir y callar en despedidas breves

de terminal y aeropuerto.

Aprender a soñar y a tener fé, cuando se deja atrás a los abuelos y enfermos. 

Ganas de gritar y de volverlos a ver, 

antes de que los tentáculos 

del comunismo arrase con todos ellos.

Caminantes, 

viajeros con miedo al si o al no de un sello,

pasaportes convertidos en libros de oraciones,

desplazados sin guerra ni aliados, pero si traidores,

historias que se repiten, 

con fragmentos que claman por la amnesia.

La hora de los náufragos, el segundo de los perdones 

Un día largo como un año, el coro de los adioses.

Bandera con estrellas desperdigadas 

en otras tierras,

Balas contra la dignidad, hambre en una gráfica,

no existe elocuencia al describir tanta tragedia. 

Minutos de silencios convertidos en horas que se hacen días que redundan en años acumulados. Venezuela duele... como tiempo desperdiciado entre desplazados. R.R.R.


Han jugado con nuestras mentes, 

unos dudamos de todos y de todo,

y otros ya no sienten 

más que hambre en el estómago.


Bolsa vacía vuela en el aire,

antes basura y ahora el tesoro de alguien. 

Ejecutados con tanques sobre niños,

o misiles contra casa de rebeldes rendidos,

es la tiranía de mercaderes de la tragedia,

aquellos que con la comida o medicinas juegan.

Tantos años secuestrados, 

mucho hemos olvidado, crímenes acumulados,

y todo lo normal que dábamos por sentado,

cada vez cuesta más recordarlo. 


Lo insólito se hace rutinario, 

un día hecho semana, 

un mes que pesa en el calendario.

La cicatriz crece y cualquier sonido raro 

creemos que es un disparo, 

si tenemos luz o agua, nos alegramos. 

Y cuando despedimos a un familiar o amigo,

se nos arrebata una pieza del pasado 

y un futuro compartido.

Somos una casa hecha pedazos, 

cada uno, un fragmento de pared que debe recogerse 

antes de deshacerse en otras manos.

 Rene R.R  


Vértigo antes de caer vivo al abismo de la tumba,

escuchas el rumor de libres en la superficie,

personas en su rutina y pesadilla, ignoran tu tortura.

Todavía respiras, 

pero en ausencia de un reloj, estas muerto

cuando el Estado es tu dueño.

Rapado y desnudo protagonista de la burla del carcelero,

entre paredes blancas, tufo extranjero y su silencio,

Imaginas hasta olvidar el sonido de un segundero,

aplastado como una cucaracha, sin terminar crujiendo,

golpes que no dejan marcas ni rompen los huesos.

Sed de una hoja de papel, de plasmar lucidez 

en medio de tanto tormento.

Olvidas tu cara, hace tiempo que no ves tu reflejo,

el valor del amanecer, de oler, probar o palpar 

algo ajeno al encierro,

cada sentido lento o rápido, iba desapareciendo 

casi olvidando al elefante inmenso que sin saberlo,

puede romper cadenas en un solo movimiento,

los Dioses pueden sangrar, deben sentir miedo.

El tirano y su baile, 

del éxito y fracaso de poder domesticarte.

Deshumanizando hasta al último rastro de tu nombre,

jugueteando con el anonimato, la amnesia,

la paranoia al reclamo, a la defensa de un extraño,

a las ganas, a la lucha, 

a tu alma más allá de unos barrotes.

Frío hierro, luz blanca y cegadora...

clamas por el dolor, sentir la herida, 

ver la sangre y su color, la certeza de seguir con vida,



El fantasma que sin sabanas, 

duda si es de carne o es de nada.

Lejos del sarcófago impoluto piensas en los otros,

los que dejas atrás, nadie sabe que están allí,

terror absoluto, por los inocentes sin rostro,

las cucarachas pisadas antes de que puedan crujir. René R.R.  

"Patria socialismo o muerte"

Fue el lema, el "grito de guerra" del difunto dictador Chávez.

La primera palabra y realidad no solo no la cumplió sino que nos las arrebato. Hoy no no tenemos patria, el país de nuestra infancia, de la vida que íbamos a vivir, de nuestros recuerdos, familia y amigos, ya no existe. Se redujo a una mala noticia, a una tragedia diaria que olvidar, superar y dejar atrás. Una cicatriz abierta, un tatuaje que quema y sangra.

El no lugar, fue la promesa de Chávez, disfrazado en aquel nefasto lema, grito de batalla en una Venezuela en paz. Hoy somos secuestrados muchos, secuestrados otros, inmigrantes otros, huérfanos, viudos, cada uno en su luto. 

Aislados, exiliados, desplazados, solos.

Y ahora náufragos moribundos.

El chavismo mata.

El comunismo es muerte. R.R.R.

Un país en retazos. Extranjeros haciendo propio lo ajeno. Girones en nuestros lazos.Palabras con otro significado. Entre no pertenecer y la nostalgia por el ahora no lugar. El no tiempo. Momentos que no volveran. Destino sin lineas en un mapa, calles cuyos nombres desconoces, platos con sabores nuevos. 

Cuando viajar no son vacaciones, una maleta que resume tu casa, tu historia, lo salvado, lo perdido, lo encontrado y el descubrimiento. Un sonido o una voz familiar en una nueva tierra, de donde germinaran otros recuerdos, un hogar, el amor y el barco para un naufrago con fé al regreso.R.R.R.





Los hijos perdidos

Cuento sobre los niños que crecieron durante el totalitarismo chavista en Venezuela. 2018








viernes, 11 de septiembre de 2020

Prohibidos





Entre las certezas y las dudas,

que nos mueven y detienen,

en su romance secreto de luces y penumbras.

Rumores y susurros nos cuestionan,

El sentido de buscarle respuesta a todas las preguntas.

No hay pecado en la acción inconclusa,

Puntos suspensivos que como energía se transforman: 

En el aquí y ahora…


Sentada frente a la ventana de este tren, en su asiduo retraso con ganas de ir y no volver...


Allí sentada, entre prosas y diálogos


Allí con ansiedad y miedo, de arrancar, de la próxima estación o del eterno stop


Experta en el arte ajeno, niña en mi voz


Allí justo allí estás vos


Esperando, expectante de un giro en la trama de tu vida, del verso que no rima


Allí estás, tan eterna, tan efímera como un post


Justo allí te veo, y sin escuchar tu canción


Te digo aquí estoy yo


En tu oído, entre susurros y la calle y sus ruidos


Te invito seductor a saltar, más allá del miedo, a lo nuevo, al error



Besos entre dos cuerpos que entre alientos sus almas intercambian. Dos coincidencias dilatadas,tantos arrepentimientos y 

sus dolorosas pausas. 
Recuerdos que conmueven y 
otros que desvelan,
pensamientos 
sobre consecuencias y sus causas.
Imágenes de tu piel que hierve 
y mí miedo a perder el control 
cuando el deseo es quien manda.
Silencio atronador, tiempo de separación,
tanto que decir cuando sobran 
y a la vez no alcanzan las palabras.


En esa cercanía, 
a pesar de los kilómetros 
y realidades que ahora nos separan.
Momentos que bloqueo
para adormecer sentimientos,
aquellos puestos en rimas prohibidas,
latidos suspendidos en el tiempo,
confinados sin ser presos,  
en esas suerte de cartas mías 
que aún tu guardas. 





Si fue amor, no de ayer solo sin futuro probable o cercano. De sentimientos y dedos cálidos, mezclados entre el sudor, la fricción y el momento injusto. El instante que acerca luego nos deja separados y en pedazos. Rastros de mar en la arena, olas con el vaíven que coquetea. Eres tú en frío un recuerdo que abriga. 


Un tesoro bien guardado en la secreta memoria. La insomnia, las caricias mientras el otro dormía. Si fue amor, ninguno lo sabía. Lo decíamos pero fue tan instantaneo se disfrazó de fantasía y ahora de melancoĺía, pero no lo es ni nostalgía, es otra cosa sin nombre ni rostro, un pensamiento silencioso, serpenteante en la soledad, un acompañante, un dulce ataque, una verdad que no se puede engañar. R.R.R.





Perdiendo el tiempo.


Atascados en el momento casi perfecto,
abrazados a esos instantes tan pequeños pero nuestros.
Mi olor y tu sabor mientras respirábamos el aliento del otro,
como guardándolo,
tal cual oro,
atesorando el instante
que se sabía sería un lejano,
dulce y doloroso recuerdo.
Y aquí estamos,
separados en medio del mutuo destierro,
más juntos que cuando sentías el calor de mi cuerpo,
y yo la suavidad de tu piel,
juntos bien adentro, el total secreto.


La fé de volver, del amanecer a esta noche,
a la paz, al sudor, a dos miradas que se aman,
sin reproches o miedos.
Que se encuentran cuando se piensan,
cuando no hay cadenas ni distancias,
todo tan simple, sentido y honesto.
La verdad engañada. El amor que se esconde para perder el tiempo.R.R.R.












Lo nuestro es descubrimiento como 
planetas ardiendo en un mismo lugar. 
stellium en besos que desgarran, que no 
saben de distancias, que solo saben en su 
ignorancia, explotar.R.R.R.









Tu mirada habla y me encantaría descubrir lo que tiene que decir.



Rotos en pedazos al mínimo contacto imaginario. Pensamientos que pausamos o que camuflajeamos entre lo olvidado. Cada fragmento entero de nuevo 
tras un breve saludo o un secreto recuerdo.
Nadie lo sabe, lo prohibido, lo imposible e impensable, a flor de piel, tan real, en sueños casi palpables. 



Cómo la familia que pudo ser, los niños no nacidos que nos amarían como padres. El o ella, uno, dos o tres, entre el claudicar, la ilusión, el cinismo y nuestra fé. Amar lo que fue y pudo ser, tu rostro y mí voz en la extensión de nuestra piel. Frenesí en susurros, suerte de serenatas de canciones que te... ojalá escuchemos juntos. Somos la tormenta perfecta entre circunstancias adversas y emociones intactas que siempre viajan contra el tiempo y la marea. R.R.R.





Oasis 
En medio de la tormenta de un mundo atrapado en una pausa eterna, lo volvimos a hacer, dos quimeras y su coincidencia, dos escorpiones enajenados en su tregua. Un Oasis para sedientos, de paz y disfrute, de momentos que a lo lejos, más allá del tiempo, igual se recuerdan. Cómo aquellos besos bajo las estrellas, acostados sobre la grama, que nuestro secreto nunca delata, bailes sin público, tantos amaneceres juntos, gracias por esos instantes, solo míos, solo tuyos, la serendipia de buscar la soledad y terminar juntos en un segundo que se contuvo. René R.R.





Segura en tu silencio, en aquel rincón libre de arrepentimientos.

Allí estás, entre brújulas rotas de viajeros sin regreso.

Pude verte y fingiste locura, esa de borrachos que mienten en su juramento de que lo olvidaron todo luego.

Susurros atronadores cuando se hacen recuerdos que juegan a ser imaginación, allí estoy yo, entre miradas descifrando tu secreto. R. R.






Tu voz cuando cantas 
me acaricia el alma
como mis dedos te recorren 
y descubren secretos 
en tus sueños.

Tu cabello negro 
es vivo como las llamas 
que no queman 
pero te alejan del frío y el calor.

Almas que en su trashumancia, viajan más allá de ojos abiertos para besarse 
y morderse el cuello.

Éxtasis de atrapar tu aliento 
en una bocanada 
es la magia de convertir 
tu suspiro y gemido
en el oxígeno de mi respiración.Rene R.R.




Tu rostro preso en fotos,
te hizo dueña de pensamientos 
que nunca de mí te alejan. 

Tan presente, tan ajena
lejos pero cerca cuando te imagino conmigo

 arrugando sábanas y mordiendo almohadas empapadas. 

Allí estás en ese abrazo al aire

en el calor de tus piernas invisibles sobre las mías en mañana inagotable

allí estás, con tu rostro perfecto, la inspiración en mí voz y en mis dedos.



Batman, 

Era una tarde veraniega, eetabamoa cenando, aún había luz del sol, aunque ya apuntaba su caída. Recogí la mesa y me voy al lavaplatos. Has venido a la nevera en busca de agua, observas mi vestido de jeans con falda en tipo A. Te acercas a mi oído para decirme lo bien que me queda. Notas que al contacto de tu boca en mi oreja se me eriza la piel, nobes secreto, orejas, cuello, senos son mia pubtoa débiles,  soy muy de roces, lo sabes y te aprovechas de la situación. Te quedas allí detrás de mi, frotando tu miembro en mis nalgas y tus manos juegan con mi cabello, lo tieas hacia adelante y empiezas a comerme la nuca. Jadeo sin control. Vas abriendo mis piernas con tu mano izquierda,  buscas bajarme mi ropa interior la falta se interpone y pierdes la paciencia.  Con tusdos manos acomodas la falda del vestido, quitas mis ropa interior, sacas tu miembro, me inclinas hacia el lavaplatos y me penetras. R.R.N

TE MIRO 

Te miro mas allá de la tierra 
mas allá de la selva

Te miro de lejos y de cerca
desde dentro y desde fuera 
desde arriba y desde abajo 

Contemplo tu esencia 
tu superficialidad 
tu deseo 
el cuerpo y alma 
de vida y muerte 
entre incertidumbre y certeza.

L.R.
1/8/25


Entre Erres, la Resurrección

Entre erres,
norte y sur nos distancian...

Entre erres vive la esperanza
y la resurrección.

Coincidencias de letras,
las erres de nuestros nombres,
y un país que no puede pronunciarlas.

Dicen que entre erres
solo caben la rabia, el rencor, lo ridículo, lo ruin.
Dicen…
los que no miran más allá
de lo cotidiano en el léxico de sus palabras.

Pero entre erres
también habita la risa,
el resplandor,
lo que rejuvenece.

La resiliencia.
Lo romántico.
Lo que reina.
La recompensa.
Nuestras rimas
y su revelación:

El amor.

Entre erres
corre un rumor.
Pero no es un ruido,
es el latir del deseo:
dos presencias;
un torrencial rocío
que va fluyendo en Descartes,
con la fuerza de un río.
En el que fluyen instantes y fragmentos 
de una musa entre erres de nuestra oración. 







Aprendí a conocerte años después 
a pesar de los meses 
en los que compartimos techo y pared.

Sos vendaval, calma y lágrimas 
Que no se mezclan como aceite en el agua.

Descubrí también 
la rudeza de tu filo 
y la certeza de sentimientos 
que no penden de un hilo.

Prisioneros en paralelo 
de celdas sin cadenas 
la relatividad del tiempo 
y nuestras sentencias.

Queda acompañarte a lo lejos 
entre abrazos en forma de textos 

un stellium en escorpio 
un beso que ya no es de novios. R.R.